Un nuevo año para seguir contando mi historia

 

Hola¡

Empezando el nuevo año con una entrada del blog, un año más para contar nuevas y diferentes historias, para seguir algunas, pero siempre para seguir adelante.

Bueno, dicho esto, les comparto que estoy en remisión de la depresión y ansiedad, eso significa que aún no me han dado el alta definitiva y aún permanezco con medicación, pero ya no de forma continua, pero tampoco puedo dejarla del todo. Les había contado que esto es un proceso que toma tiempo y en mi caso he mejorado muchísimo, las crisis de ansiedad han sido muy pocas, salvo ciertos momentos que identifiqué y pude apoyarme tanto en mi red como mis propios recursos para manejar las reacciones, igual la depresión, si bien ya no he tenido episodios, es bueno tener consciencia de los momentos o circunstancias que pueden llevarme a esos estados.

Seguir con el proceso psicoterapéutico fue un gran momento porque pude aprender herramientas que me ayudan a permanecer consciente de mis reacciones, eso sí, debo agradecer a las personas que están cerca de mí sin importar la distancia y me conectan a tierra.

Me gustaría decir que ya estoy recuperada del todo, pero aún falta un buen camino, tengo temores que aún son difíciles de enfrentar, aún reacciono ante el rechazo y el abandono de una manera que me asusta y tiendo a huir, pero trato cada día de permanecer lo suficiente para que mi ansiedad no se presente.

Estos días, ha estado conviviendo en mi diario vivir, la incertidumbre del trabajo, las dudas del nuevo año, relaciones interpersonales que terminan e inician, la familia, en fin, un sinnúmero de situaciones que por la misma fecha tienden a ser abrumantes y más para quienes convivimos con la ansiedad, el pensamiento es más vívido, las ideas son más acuciantes, el futuro se vuelve un monstruo de dudas, así lo he pasado este mes de diciembre, pero por ahora ha sido algo manejable, aunque no puedo negar que las ganas de salir corriendo están, de salir de la vida de muchas personas, de salir del país, de empezar algo lejos de todo lo que conozco para ver si algo cambia, si mi ansiedad se aquieta y desparece de una buena vez, pero sé que no será así, aun cuando viva en el polo norte o en marte o Saturno o en otra galaxia, la ansiedad siempre irá conmigo hasta que un día, por fin, ya no estará.

Este año, el propósito es poder seguir alimentando este blog, compartiendo con ustedes parte de mi proceso y si por ahí le resuena a alguien, me sentiré honrada de saber que algo bueno estoy haciendo con mis condiciones de salud mental.

Hasta la próxima¡

Chío

Imagen tomada de Alberto Montt