La importancia de las redes de apoyo en medio de la depresión
Hace algunos meses les ofrecí escribir acerca de cómo es la vida después de
la depresión y la ansiedad, la verdad es que ha pasado tantas cosas a la vez
que me descuidé de continuar con el hilo, aun así, hoy encuentro la fuerza
suficiente para hacerlo, y finalmente me animo a contarles algunas cosas que me
han servido durante este tiempo, aún no estoy con el alta definitiva, así que
sigo en recuperación, por así decirlo.
Uno de los pilares fundamentales son las redes de apoyo, las que se han
construido o aquellas que se pueden construir en este proceso, en mi caso, me
ayudó mucho tener una red de mujeres que previamente hemos tejido una grandiosa
amistad, ellas fueron y son mi sostén durante este tiempo. Cuando tenía ataques
de ansiedad o pánico, mismos que fueron incrementándose en los días, una de
ellas me dijo: “¿has pensado en
escalar la ayuda?”, yo, sabía perfectamente a qué se refería, y
esperaba a que no sea así, pero lo era, significaba acudir a psiquiatría.
Debo confesar que me dio algo de temor, si bien yo soy parte del sistema de
salud mental y eso comprende la psiquiatría, jamás estuve tan cerca de pedir
ayuda así, por tanto, lo consideré, no lo negué, pero tampoco estaba tan
convencida.
Esta red de mujeres que me apoyaron, cuando supieron que haría esto, me
contuvieron en todo momento, siempre deseándome lo mejor y por supuesto,
preguntando en todo momento cómo me sentía, jamás me sentí juzgada o criticada
o menos aún aconsejada, simplemente desde donde cada una se encontraba me
acompañó, eso me alivió tanto a no sentirme sola en este proceso.
Por otro lado, y aunque puede que, en otras personas, quizá para quienes me
leen, pueden considerar que la familia no es un punto de apoyo, ya sea por su
historia personal u otras experiencias, en mi caso, mi familia me ayudó mucho
con su comprensión, mi padre y hermano me acompañaron a la primera cita y
aunque no comprendían mucho sobre qué significaba ir a una cita con el
psiquiatra, comprendían que yo necesitaba ayuda y eso me haría bien, por tanto,
estaban conmigo en todo momento.
Mi padre me preguntaba sobre qué es la depresión, en lo que yo le podía
explicar en términos que pueda comprenderme me preguntaba: ¿Por qué estás tan triste? Algo que no siempre tenía una respuesta
ni para él ni para mí ni para el mundo en ese momento.
Parte de estas redes de apoyo también la considero a los profesionales de
salud mental que me sostuvieron, mis 2 psicoterapeutas, mi guía espiritual y mi
psiquiatra, profesionales tan valiosxs y expertxs que me acompañaron en cada
paso que di de este proceso, reconozco la importancia de pedir ayuda profesional,
así como también incluir mi práctica personal espiritual, mi reconocimiento a
una entidad superior a mí que me ha permitido encontrar algo más allá de lo que
va de mi entendimiento.
Tampoco puedo dejar de reconocer en este proceso a 2 personas que me
guiaron en el proceso de acudir a pedir ayuda psiquiátrica, yo conocía sobre sus
condiciones de salud mental y con algo de temor les pregunté, me contaron su
experiencia, cómo fue el proceso inicial, qué cosas necesitaba tomar en cuenta,
a qué profesionales me recomendaban, en fin, fue como hablar con colegas (que,
por cierto, lo son) sobre un estudio de caso, el caso fui yo.
Durante un año y medio casi, esta red sigue prosperando, sigue siendo una
red donde busco apoyo, refugio, amor, comprensión, abrigo cuando más lo
necesito, y en la manera que pueden brindarme todo eso lo tomo con mucho amor,
ya que no imaginan todo el bien que me ha hecho durante tanto tiempo para
sobrevivir este embate en mi vida.
Quiero agradecer por este medio a esa red que me apoyó y lo sigue haciendo
desde donde sea que se encuentre, ya sea al otro lado de una misma ciudad, o al
otro lado del país, o incluso al otro lado del planeta.
A todxs ellxs por ser mi soporte emocional y de amor:
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Karla (Karlita)
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Adriana (Adry)
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Adriana (vecina)
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Vanessa (Vane)
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Yanina (Yani)
- Henry (jefesiño)
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Víctor (papi)
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Andrés (ñaño)
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Carolina (negrita)
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Marco (primix)
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Renán (amigo)
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Diego (amigo al otro lado del mundo)
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María Guadalupe (Guaya, psicoterapeuta)
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Maru (psicoterapeuta)
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Carlos (psiquiatra)
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David (amigo y colega)
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Jorge
Luis (amigo y colega)
- Alberto (doc)
Pablo (al otro lado del mundo)
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Vinicio (muñeco)
Si por ahí me falta alguna persona, sabe que la llevaré siempre en mi
corazón.
Gracias a todxs ustedes.
Eres una mujer muy valiente al ofrecerte a ti misma, a través de este blog, para ser espejo de muchas otras que leyendote, ya no se sentirán tan solas. Te quiero y admiro...
ResponderEliminarGracias por tus palabras, me motivan a seguir escribiendo
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